Adulto Mayor y actividad física

"No es novedad que nuestro país ha envejecido y ha aumentado la esperanza de vida, por eso la real importancia de un envejecimiento activo, pero ¿a qué nos referimos con aquello?

El envejecimiento activo se basa en una participación continua de las personas mayores en actividades sociales, económicas, culturales, espirituales y cívicas. Lo que nos lleva, como gran reto, a prolongar por más tiempo las capacidades, las expectativas de vida y la participación de adultos mayores en la sociedad.

Es por ello que no debemos dejar de lado la promoción de vida saludable, el mejorar los hábitos alimenticios y como no, aumentar la actividad física si es que no se ha instaurado aún en su día a día.

En cuanto a la actividad física en esta etapa, ha demostrado influir en disminuir las tasas de mortalidad en relación a cardiopatías coronarias, accidentes cerebrovasculares, cáncer, entre otros. Además de mejorar el sistema cardiorespiratorio, mejorar la masa muscular-ósea y mejorar la composición corporal del individuo.

Prevenir la aparición de enfermedades como la diabetes tipo 2, la hipertensión arterial, enfermedades cardiovasculares, entre otras.

Ayuda también a nivel funcional pues mejora el equilibrio, reduce el riesgo de caídas y disminuye el riesgo de limitaciones funcionales en grado moderado y grave.

Finalmente ayuda a mejorar la autoestima, la autoeficacia, mantiene en mejor estado las funciones cognitivas y ayuda en la depresión.

Todo aquello trae beneficios en su calidad de vida como adulto mayor. Por ello es primordial tanto de la sociedad como de políticas públicas el mejorar la autonomía, la salud y la productividad de los adultos mayores mediante iniciativas que proporcionen su apoyo en diversos aspectos de la vida en comunidad".

                                                                           Scarleth Vera Mena

                                                                           Kinesióloga Gerontológica PUCV